Gran alarma se suscitó durante la tarde de este martes al darse a conocer el aparatoso accidente protagonizado por una aeronave de la línea Aeroméxico que se precipitó a pocos minutos de despegar del aeropuerto del Durango.
Se trata de la aeronave Embraer ERJ-190AR cubría el vuelo AM2431 Durango - Ciudad de México y que transportaba 97 pasajeros y cuatro miembros de la tripulación.
Entre los pasajeros llamó la atención el testimonio de una de las pasajeras y sobrevivientes del accidente, la señora Jaqueline Flores, de 47 años de edad, originaria de Durango y radicada en Bogotá, Colombia.
Luego de los alarmantes hechos, Jaqueline relató ante la prensa local su experiencia y cómo logro salir casi ilesa, junto a su hija, de la aeronave en llamas.
"Iniciaron los motores, se sintió la fuerza del avión como para ya despegar, y mientras íbamos en la pista es que se va oscureciendo la visibilidad. Sí despegó, nos elevamos y empezamos a entrar entre las nubes y la tormenta", relató Jaqueline.
"Cuando íbamos ya arriba, yo sentí que iba a dar la vuelta para estabilizarse y ahí fue cuando se cayó", declaró de manera puntual y calmada, precisando que la aeronave se precipitó sobre la pista y se desplazó por varios metros hasta lograr detenerse en un aérea con maleza y tierra.
"Durante ese deslizamiento se caen todas las maletas del pasillo (?) la vibración hace que uno se golpee entre la gente de adelante y de atrás", dijo esta mujer únicamente con una lesión en una de sus manos, mientras que su hija, de 16 años de edad, resultó ilesa.
Cuando el avión finalmente quedó inmóvil, la mujer se percató del humo y del fuego y rápidamente desabrochó su cinturón y junto a su hija, se aprestó para salir del avión siniestrado.
"Había un hueco justo al lado de nosotros, que teníamos el lugar 8A y 8B. A la altura del lugar 10 estaba abierto el avión, o sea el avión se partió. Con fuego y todo le digo a mi hija "tenemos que saltar por ahí", y por ahí saltamos", relata la fémina que perdió todas sus pertenencias e identificaciones entre las llamas.
"La gente estaba en pánico, iba otra familia con sus tres niños y otro señor que iba todo ensangrentado de la cabeza", ha contado la mujer a la prensa local.
De acuerdo con el testimonio de esta sobreviviente, los servicios de emergencia llegaron aproximadamente 20 minutos después de la caída de la nave.
En su declaración, Jaqueline también hizo un llamado al personal del Aeroméxico y a las autoridades locales para que la auxiliaran, pues perdió toda su documentación y debía transbordar con destino a la ciudad de Bogotá.
Por su parte, Aeroméxico manifestó mediante un comunicado que estaba enfocándose en atender la situación, "haremos lo que sea necesario para auxiliar a las familias de nuestros clientes", precisó la empresa.
Las autoridades confirmaron que no hubo personas fallecidas, la mayoría de los lesionados no son de gravedad y, al parecer, el que resultó con lesiones más severas fue el piloto de la aeronave.
Foto: Cuartoscuro
